jueves, 25 de septiembre de 2008

Ficcionario


Carmen Fernández Galán


Bajo la voz ficcionario conjuntamos las funciones de diccionario y bestiario con las ficciones o mundos posibles. Lo anterior con la finalidad de ensayar las posibilidades de la crítica literaria vista desde la teoría, desde la historiografía y desde la misma ficción.

Nuestro objetivo es explorar algunos conceptos centrales de la teoría literaria y su aplicación a casos. Hemos decidido hacerlo bajo la figura de ficcionario para poder distinguir entre nuestras creencias, nuestras ficciones y nuestras hipótesis. De ese modo los géneros discursivos que estarán conjuntados aquí para el ejercicio de la crítica serán el diccionario, como obra de carácter sistemático y que permite la construcción de metalenguajes al intentar definir los conceptos, y el bestiario, como compendio de animales fabulosos para abordar los imaginarios puestos en juego en la literatura y sus mitologías subyacentes. El carácter ficticio que sumamos a esta crítica es porque el ejercicio de puesta en juego de las categorías literarias y de un intento de esclarecimiento no pretende elevarse a la posición de verdad ni de definiciones cerradas, sino de propiciar el diálogo, negociar las convenciones, desplegar las posibilidades…

La organización de estas reflexiones estará sujeta al orden arbitrario del alfabeto que supone la lectura independiente de cada entrada, como en el diccionario, pero también a las posibilidades y bifurcaciones que el link permite. Así cada artículo de ficcionario remite no sólo a entradas dentro del blog, sino dentro de la red, con el propósito de ejemplificar, de expandir la entrada, y de que el lector decida su propio itinerario.

La crítica literaria en México se encuentra en una encrucijada entre el academicismo y el favoritismo. Por lo que es necesario replantear los criterios de discusión sobre la historia literaria y la valoración de las obras. La academia recibe un enorme influjo de las teorías y terminologías extranjeras que se aplican desfasadas de contexto y circuito de producción literaria, como si fueran dos mundos aparte.

En este espacio nos hemos propuesto establecer coordenadas, reflexionar sobre las categorías y su aplicación en las obras. Por un lado con el propósito didáctico, pero sobre todo con la finalidad de confrontar el uso o el desgaste de las herramientas de la crítica.

Como el diccionario no es más que la imagen de sus redactores, hacemos explícitas las principales orientaciones teóricas del ficcionario: la semiótica, la hermenéutica, la literatura comparada y la teoría de los géneros, la historia cultural o del libro, la mitocrítica y la teoría de la ficción.

1 comentario:

rolando aqui de nuevo dijo...

La encrucijada entre el favoritismo y el academicismo. Supongo que el favoritismo es un concepto que intenta condensar la idea, vaga, de que un crítico tiene la posibilidad soberana de decidir que lee, que crítica y qué, mediante eso que construye como teoría literaria, es valioso no desde su subjetivo punto de vista, sino desde la objetividad de su teoría. Y el academicismo remite a no sé bien que red de instituciones qué, desde el manto calorifíco y caluroso del Estado nación, petrifica en documentos y burocracias lo que de otra manera es degradado a una cosa de simpatías y antipatías subjetivas.
Pero ¿cómo se traza esa distinción?, ¿desde que atalaya se observa que las cosas son realmente un corte entre academicismo y favoritismo?.
Si la subjetividad es el lugar privilegiado de una soberanía allende el mundo entonces si hay eso que queremos señalar con la idea, inconclusa y vaga, de "favoritismo", si, por el contrario, el sujeto y su subjetividad se constituyen desde formulas sociales, desde macrofenómenos allende el individuo, entonces no hay tal favoritismo, ya que todo gusto queda determinado por una posición transitoria (aunque ferrea) en el entramado de la sociedad.